La diócesis se encuentra ahora mismo sin máximo responsable. Y así seguirá hasta hoy a las 5 de la tarde cuando se reúna el Colegio de Consultores, formado por doce sacerdotes. Este es un proceso ordinario en el que se nombrará un administrador diocesano que mantendrá la diócesis "como está hasta ahora". El nuevo administrador no tiene atribuciones de arzobispo, según afirmó Ureña, y añadió que si hubiese que hacer algún nombramiento durante el periodo en el que no haya un máximo responsable, lo podría hacer llamando al Colegio de Consultores, que le aconsejaría. Además, el sucesor de Manuel Ureña podría conocerse en enero, según anunció el mismo arzobispo. "No creo que tarde mucho" y "a lo mejor en enero puede haber obispo nuevo". También pidió oraciones para el nuevo prelado, de quien afirmó que él pasará "a ser un feligrés del modo más exacto y escrupuloso".