La venta de su paquete accionarial es, al final, la salida de Agapito Iglesias, pero la vía más inmediata para apartarlo de su gestión está en la inhabilitación, un camino que ya lleva un tiempo estudiando la Asociación de Pequeños Accionistas del Real Zaragoza y que puede tener resultados en breve, en las próximas semanas. Al estar el club en un proceso concursal, la jueza del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Zaragoza, que es la que lleva el concurso, puede dictar la inhabilitación del actual presidente y máximo accionista de la entidad.

La magistrada no lo hará en todo caso de oficio, pero sí podría tomar esa decisión a partir de la documentación que se le pudiera presentar y si viera que hay indicios de delito o fraude en la gestión realizada en los últimos años. En este sentido, desde la APARZ se asegura que se está trabajando en ese sentido, aunque no se descartan otras vías para conseguir esa inhabilitación, aunque lógicamente supondrían más tiempo.

El Real Zaragoza logró el 15 de diciembre sacar adelante la Propuesta Anticipada de Convenio, lo que supone el primer paso para salir del concurso de acreedores. La jueza tiene que aprobar ahora esa PAC, dando fe de que se ha llegado al 50% del pasivo ordinario, pero antes debe decidir sobre las impugnaciones de los acreedores al informe concursal, alguna presentada por el Zaragoza. En total, son 20, la mayoría pequeñas en la cuantía y referentes a la calificación de créditos, pero todavía no se han empezado a estudiar, cuando el plazo para presentarlas finalizó a mediados de diciembre.

LA EXPLICACIÓN Así, todo apunta a que el cese de la actividad de los tres administradores concursales, que se estableció para unos dos meses tras la aprobación de la PAC, es decir para mediados de febrero, puede retrasarse, como también la salida del concurso, quizá hasta marzo o abril. Ese retraso también da más tiempo para una posible inhabilitación del máximo accionista por parte de la jueza que lleva el concurso de acreedores del Zaragoza.