Agapito Iglesias solo aparece en público a través de la página web del Real Zaragoza. Tras ausentarse del encuentro contra el Getafe, el presidente, como es común en los últimos tiempos, se ha pronunciado en un comunicado sobre, entre otros asuntos, la manifestación promovida por la plataforma Salvemos el Real Zaragoza. "El presidente del Real Zaragoza, Agapito Iglesias, desea mostrar su 'respeto' por la movilización del pasado sábado, 14 de enero, que considera 'legítima".

El propietario del club aragonés dice también en el sitio zaragocista que quiere "agradecer el comportamiento de la afición por su apoyo a los jugadores durante el partido que enfrentó a nuestro equipo con el Getafe. Con la unión entre todos los sectores del zaragocismo, como se ha demostrado en los últimos años, será posible conseguir el objetivo de permanecer en la máxima categoría”, dice Agapito.

El empresario incide en que "se descarta totalmente cualquier especulación sobre la posible desaparición o liquidación de la Entidad. Cualquier información en ese sentido podría calificarse como totalmente errónea. El Real Zaragoza quiere dejar bien claro que la viabilidad y por tanto la supervivencia del Club está más que garantizada, incluso si se produjera un hipotético descenso a Segunda División".

Sobre esa hipótesis que atañe al colista de Primera División con solo once puntos, a ocho de la línea de permanencia y obligado a ganar diez de los 20 partidos que le restan después de once jornadas consecutivas sin hacerlo, Iglesias explica: "El Real Zaragoza pretende evitar, en todo caso, el descenso a toda costa, dado que el lugar del Club aragonés por historia y afición siempre debe ser la Primera Division de la Liga de Futbol Profesional, junto a los grandes del fútbol español. Por ello se va a hacer un importante esfuerzo para reforzar al equipo, como ya ha ocurrido en otras ocasiones, recurriendo al mercado de invierno e incorporando a jugadores que puedan aportar compromiso, experiencia e ilusión, siempre dentro de lo establecido en el presupuesto económico con el que se inicio el proceso del concurso de acreedores y con la supervisión de los administradores judiciales, piezas fundamentales para que se siga con rigor dicho convenio y presupuesto".