Un total de 1.019.944 ciudadanos está hoy llamado a las urnas en Aragón, 3.923 más que en las elecciones autonómicas del 2011. De ellos, 30.959 residen en el extranjero, frente a los 24.482 de hace cuatro años.

Por otro lado, 1.000.246 aragoneses podrán votar también en los comicios locales. A ellos hay que sumar 11.242 electores extranjeros residentes en Aragón procedentes de países con acuerdo de reciprocidad para las elecciones locales. Debido a la reforma de la ley electoral llevada a cabo en el 2011, no podrán participar en las municipales los españoles residentes en terceros países.

NUEVOS ELECTORES

En esta ocasión, según la Delegación del Gobierno, 11.899 aragoneses han solicitado poder votar por correo. Además, 40.527 jóvenes podrán ejercer su derecho al sufragio por primera vez en unos comicios autonómicos y locales. 9.872 nuevos votantes han alcanzado la mayoría de edad desde las últimas elecciones, las europeas del 2014

En en los 731 municipios de la comunidad autónoma se dispondrá de 1.048 locales electorales y 2.130 mesas, dotados con 2.173 urnas y 2.130 cabinas. Estas cifras suponen una reducción de 165 mesas y 15 locales electorales en todo el territorio aragonés.

Para garantizar que los comicios se desarrollan correctamente, 27.833 personas estarán hoy trabajando en Aragón. De ellos, 6.390 serán miembros de las mesas electorales, elegidos mediante sorteo. Además, 12.780 ciudadanos están llamados como suplentes, por si faltasen los presidentes o vocales titulares.

Los miembros de las mesas serán asistidos por 1.704 funcionarios de la Administración. A ellos se sumarán otras 2.976 personas entre jueces de paz, trabajadores de la Oficina del Censo, de Correos y colaboradores de los consistorios, amén de 489 secretarios de ayuntamientos. Velarán por el proceso 3.296 efectivos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

Los ayuntamientos, bajo supervisión de las juntas electorales de zona, eligen a los miembros de las mesas electorales y sus suplentes por sorteo público entre los vecinos mayores de 18 años y menores de 70 años que sepan leer y escribir. El presidente debe tener el título de bachillerato o de formación profesional de segundo grado, o el de grado escolar equivalente.

Presidentes y vocales tienen la obligación de acudir al colegio electoral, así como los suplentes, que pueden marcharse en caso de que asistan los titulares. En caso de no asistir, incurrirán en delito electoral y serán sancionados con una multa de 6 a 24 meses e incluso con prisión de 3 meses a un año.

Los designados disponen de siete días desde que reciben la notificación para alegar ante la junta electoral una causa justificada y documentada que les impida aceptar el cargo. Pueden renunciar los mayores de 65 años. Están excluídos, entre otros, quienes sean candidatos en listas, los altos cargos del Estado, ciertos funcionarios y los presos.

Los trabajadores que no disfruten de descanso el día de las elecciones y sean miembros de mesa electoral o interventores, tienen derecho a solicitar un permiso laboral y a la reducción de las cinco primeras horas de la jornada posterior, también con derecho a retribución.