La tres grupos políticos de la oposición del Ayuntamiento de Zaragoza (PP, CHA e IU) se aliarán mañana en el pleno municipal para sacar adelante una moción en la que se pide al equipo de gobierno la rescisión del contrato de la navegación en el Ebro, por la sangría económica que supone para las arcas públicas y porque entienden que es uno de los contratos prescindibles del consistorio, por el escaso uso que se le da a los barcos, las pérdidas económicas que arrastra y la inversión necesaria cada año en el dragado del río. Por eso, aunque la decisión conllevaría una indemnización a la empresa que presta el servicio, Turismo Ebro Fluvial, entienden que sería menor que el gasto al que obligaría en los próximos años mantenerlo. Se aprobará la moción, aunque esta no suponga la obligación de rescindirlo, una decisión que queda en manos del alcalde, Juan Alberto Belloch, al que dejarán en la tesitura de justificar su mantenimiento mientras se estudian recortes en gasto público y en salarios del personal funcionario. Este fue prácticamente la única novedad en la junta de portavoces celebrada ayer, en la que también se acordó fijar para el próximo martes la junta extraordinaria que se dedicará a las medidas económicas a adoptar en el plan de ajuste. Por otra parte, como se esperaba, los grupos de la oposición anunciaron que aprobarán la moción por la que se exige al equipo de gobierno abandonar el proyecto de Expo Paisajes y descartar las inversiones que este requiera.