El nuevo barrio del sur, dada la incógnita de su futura población, es para el que se consideran necesarios menos equipamientos. De este modo, se apunta a la exigencia de un colegio que puedan usar los vecinos, pero de forma compartida. En cuanto a las guarderías, solo se prevé que sea necesaria una en el 2022. En el 2017 podría ser preciso un colegio de Infantil. Si el ritmo de construcción es mayor se podrían requerir seis centros en el 2022.