Entre las importantes ausencias en la concentración celebrada ayer por los trabajadores de AUZ destacaba la de todos los concejales del ayuntamiento, que no acudieron ayer a mostrar un apoyo que, en declaraciones, insistieron en que es "incondicional". Ni siquiera CHA e IU estuvieron ayer a pesar de defender que la actitud de la empresa es intolerable y aboguen por rescindir el contrato si hay un resquicio legal que lo permita. ¿La razón? Oficialmente, todos estaban fuera.

Aunque CHA e IU seguían trabajando ayer en que se produzca una nueva reunión. Y convencieron al alcalde accidental, Roberto Fernández, de que debe convocar una reunión de inmediato para evitar los 153 despidos. Este admitió que lo haría "si el comité acepta la propuesta que hizo Carmen Dueso", de reducirlos a 45 a cambio de retornar en un plazo de dos años y una reducción salarial del 4,4%