El consejero aragonés de Obras Públicas, Rafael Fernández de Alarcón, avanzó que la propuesta de servicios ferroviarios de interés para Aragón incluirá alguna mejora en el número de expediciones Zaragoza-Huesca porque es "imprescindible" aunque no sea rentable económicamente. Como es habitual, no aportó más datos en cuanto al número de trenes o frecuencias.

Así lo indicó en respuesta a una pregunta en el pleno de las Cortes del diputado de CHA Gregorio Briz sobre los fundamentos económicos y sociales en los que estarán basadas las relaciones ferroviarias de interés público y con qué financiación va a contar el convenio que va a firmar el Gobierno de Aragón con Renfe o con cualquier operador alternativo tras la liberalización del transporte de viajeros.

Briz recordó que la propuesta que en diciembre hizo el Ministerio de Fomento sobre las obligaciones de servicio público de infraestructuras ferroviarias suponían una reducción en torno al 40% de los de media distancia de Aragón que "está por ver", advirtió. Pero consideró que Fernández de Alarcón ha actuado "tarde" porque en julio se sabía que iba a suceder.

Fernández de Alarcón resaltó que lo primero que logró es que fuera obligación de servicio público la conexión Zaragoza-Monzón, cuando "se caía", y también Zaragoza-Caspe, y que no se reduzca ningún servicio entre Zaragoza y Huesca, al tiempo que apuntó que sigue intentando que no caigan viajes de otra obligación, que no especificó en el pleno.