Los Bomberos de la Diputación de Zaragoza acudieron la madrugada del sábado al domingo a una vivienda de Maella para capturar una serpiente que se había metido en la habitación en la que dormían un matrimonio y un bebé.

En torno a las 06.00 horas, la niña había empezado a llorar en su cuna y los padres encendieron la luz. Justo cuando iban a volver a apagarla vieron la serpiente, que estaba en la cama de matrimonio. Por suerte, se trataba de una culebra de escalera, una especie muy común en Aragón que no tiene veneno.

No obstante, el matrimonio se llevó un gran susto y, tras coger al bebé, cerraron la puerta de la habitación, se metieron en la cocina y llamaron al 112. Intervinieron bomberos de la Diputación de Zaragoza del parque de Caspe, que encontraron la serpiente debajo de la almohada de la cama y la capturaron con unos guantes tras identificar la especie y saber con certeza que no era peligrosa. Luego la soltaron en un campo cercano. El reptil medía unos 70 u 80 centímetros. El reptil es de la misma especie que las dos que se encontraron en junio, una en los juzgados de Zaraogza y otra en el barrio de Las Fuentes. Los trabajadores de la Ciudad de la Justicia se llevaron un buen susto al encontrar en el baño una culebra de escalera, de casi medio metro de largo. El ejemplar, que fue metido en una caja por el personal de seguridad, fue luego liberado.