El recibo del agua no subirá el año que viene. CHA consiguió arrancar el compromiso unánime de todos los grupos municipales para que el año que viene no se aplique ningún incremento en esta tasa medioambiental argumentando que, como ya adelantó este diario, lo que se recauda cada año ya es cantidad suficiente para cubrir los costes de explotación del abastecimiento (alcanza el 98,5% tras la progresiva caída del consumo). Los ingresos ya casi costean los gastos y la normativa autonómica, estatal y europea impediría cobrar más de lo que cuesta, de manera que no había forma objetiva de oponerse a un compromiso con la ciudadanía en el salón de plenos.

Este fue el segundo acuerdo por unanimidad en materia de impuestos y tasas municipales (también se produjo con el IBI) y sirvió para trasladar a la ciudadanía ese compromiso. El concejal del grupo municipal de CHA Carmelo Asensio defendió que "hay que ser responsables y así plantear que no suba en el 2013 porque el precio se ha incrementado un 300% en los últimos años y se paga un canon por unas infraestructuras que no usamos".

Este es su principal caballo de batalla, ya que si Zaragoza paga como si bebiera agua directamente del río Aragón, no es normal que solo disfrute de esa calidad "solo 30 días al año", cuando en el 2009 "nos faltó crear la denominación de origen". Por eso exigió también conocer cómo se fija el precio del agua porque no admitirá que las obras de Yesa sirvan para explicar subidas injustificadas del recibo en el futuro. Para eso es decisivo que siga siendo una tasa y no un precio público. Exactamente lo que planteó el vicealcalde, Fernando Gimeno, que aseguró que "se han cubierto las infrestructuras por otros métodos distintos a las tasas" y que habrá que hacer planes e inversiones para garantizar la calidad del abastecimiento, por lo que hay que "avanzar para pasar de tasa a tarifa".

Por su parte, el concejal del PP, Fernando Ledesma, afirmó que el PSOE ha subido el agua ha subido un 73% lineal desde que gobierna. Mientras, desde IU, Pablo Muñoz, incidió en que "la tabla rasa para todos no nos gusta, apostamos por la progresividad", para que paguen más los que más tienen.