Cada vez está más cerca de que se haga realidad el viejo sueño de muchos aragoneses que durante décadas han reclamado que el entorno de la estación de Canfranc dejara de ser un espacio muerto que no llevaba a ningún sitio. El consejero de Vertebración del Territorio del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, anunció ayer que la próxima semana se publicarán los pliegos de licitación de las obras con los que se culminará todo el entorno de la estación.

De este modo, cobrará vida la explanada del viejo edificio internacional, el inmueble modernista completamente rehabilitado, así como los edificios adyacentes, la playa de vías y la nueva estación, con vistas a la reapertura definitiva de la línea internacional, cerrada en 1971 tras un accidente en la vertiente francesa que inhabilitó el trazado. El proyecto, en un único contrato, tendrá un coste total de 27 millones de euros, sin contar el IVA. Las empresas que quieran optar al concurso tendrán de plazo hasta finales de octubre. Eso sí, habrá diversas fases de ejecución de unas obras que terminarán en el 2021 y que empezarán a partir del tercer trimestre del próximo año.

OBRAS A TODA VELOCIDAD

Las primeras obras que se pondrán en marcha serán las de la futura estación y el nuevo haz de vías, con un presupuesto de 2,25 y 5,28 millones de euros, respectivamente. Los trabajos comenzarán en el tercer trimestre del 2018 y concluirán justo un año después. Solo una vez que hayan concluido estas podrán empezar las obras de urbanización integral del entorno, con un coste de 6,4 millones de euros, y las de la rehabilitación integral del edificio principal -que se destinará a usos terciarios--, con una dotación de 13,03 millones. En estos momentos se está trabajando en el gran vestíbulo de la antigua estación, cuyas obras ya están muy avanzadas, y que serán de uso público.

Está previsto que la urbanización concluya en el primer trimestre del 2021 y la rehabilitación del edificio principal en el tercero del 2021.

El motivo por el que todo el paquete de obras se licita en un mismo contrato y una sola adjudicataria es, según explicó el consejero Soro, porque todas ellas están «interrelacionadas y supeditadas al último fin del proyecto, que es su uso ferroviario como lí- nea internacional». Soro destacó la complejidad de la elaboración del pliego, así como de la ejecución, por lo que se consideró que esta era la fórmula más apropiada para el cumplimiento de los plazos.

CONVENIOS

Para arreglar el resto de edificaciones del complejo, destinadas a viviendas y usos terciarios, como podría ser un futuro museo del ferrocarril, Soro espera impulsar convenios con otras administraciones y entidades. De hecho, el Ayuntamiento de Canfranc tendrá un papel muy relevante en la futura intervención. Al anuncio del contrato asistió, de hecho, el alcalde de la localidad pirenaica. O un convenio que permitirá tener, porejemplo, un centro de acogida dentro del Camino de Santiago, otra iniciativa turística que para la consejería que dirige el nacionalista Soro es una prioridad para el desarrollo de esa zona.

Según destacó el dirigente de CHA, ya ha habido diversas empresas que se han interesado por el proyecto. Estas tendrán hasta el 27 de octubre para presentar sus ofertas.

En la rueda de prensa en la que se anunció la licitación de este proyecto, estratégico para el Gobierno de Aragón e «icónico» para los aragoneses, estuvieron presentes, además del consejero y su equipo, el alcalde de Canfranc, Fernando Sánchez, y el director general de Urbanismo del Gobierno de Aragón, Carmelo Bosque.

El proceso de urbanización de todo el entorno y la construcción de las nuevas infraestructuras ferroviarias son el paso previo para la reapertura de la línea internacional, que está todavía en fase de estudios técnicos pero que cuenta, por primera vez en 40 años, con voluntad política a un lado y otro de la frontera.