La Diputación de Zaragoza ha comenzado el arreglo de la carretera provincial CV-937 entre Torrehermosa y Alconchel de Ariza, que quedará cortada al tráfico a partir de este próximo lunes.

Las obras se han adjudicado por 874.000 euros, está previsto que duren en torno a seis meses y permitirán acondicionar un tramo de vía de tres kilómetros mejorando el trazado actual y ensanchando la calzada. Mientras duren los trabajos, los vehículos podrán circular por un desvío que se ha habilitado.

«Oficialmente, el plazo de ejecución de la obra es de 13 meses, pero la empresa adjudicataria espera poder terminarlas en la mitad de tiempo», destacó el diputado delegado de Vías y Obras de la DPZ, Francisco Compés.

«Además, si todo va bien, el año que viene comenzaremos la construcción de la variante de Torrehermosa, así que para finales de este mandato completaremos el arreglo de todo el tramo Torrehermosa-Alconchel».

Con esta obra de infraestructuras, la DPZ acomete la mejora de las comunicaciones en una zona remota de la provincia, dentro de la comarca de la Comunidad de Calatayud. Con estas actuaciones se pretende mejorar la calidad de vida de los vecinos, así como la seguridad vial en una vía que presenta las deficiencias típicas de la carreteras construidas hace muchos años.

El acondicionamiento, además de ganar anchura, supondrá rectificar el trazado y poner un firme liso en tramos muy bacheados por el paso de vehículos

Con esta actuación, la DPZ no solo mejora la comunicación entre dos localidades, sino que además facilita el acceso entre la autovía A-2 y la provincia de Guadalajara, en la que penetra la CV-937. La idea es dotar a la ruta de unos estándares comunes que la igualen con otras vías de la provincia de Zaragoza en anchura y tipo de firme.