Mantener controlada la presión arterial es una de las medidas aconsejadas por los médicos de atención primaria para prevenir la hipertensión. Además, estos profesionales recomiendan que sea el mismo paciente el que se haga la medición en su domicilio a través de tensiómetros electrónicos. Según un estudio realizado por PiC, perteneciente al grupo Artansa, especializado en productos para el cuidado personal de la salud, el 76,4% de los médicos sugieren a sus pacientes que realicen el seguimiento en sus casas. Susana Sánchez, miembro de márketing de PiC, explicó que la tensión de muchos pacientes aumenta en la consulta porque se ponen nerviosos "por lo que es bueno que y su tensión aumenta "por lo que es mejor que la prueba la hagan tranquilamente en casa".

El jefe de producto de PiC, Félix Torija, explicó que la característica que más valoran los profesionales en un tensiómetro eléctrico es la validación clínica. "El aparato debe estar homologado para que sea totalmente fiable", indicó. La Sociedad Europea de Hipertensión "otorga la recomendación más prestigiosa", añadió Torija. Si los datos que aporta el tensiómetro son erróneos, "crea problemas en el paciente", de ahí la importancia de que el aparato esté homologado y bien calibrado para reflejar los valores exactos.

La sencillez y facilidad de uso, además de un precio asequible, son otros factores valorados. Marcas como PiC han desarrollado una línea de tensiómetros adaptados a las necesidades de cada paciente. "Actualmente existen aparatos de empleo sencillo para personas mayores", dijo Sánchez. También hay modelos de muñeca, recomendados para pacientes con problemas de obesidad y otros personalizados, especiales para diabéticos ya que sus valores son más elevados que lo habitual.