Ha sido ponerse a hablar de construir más y más pisos y la situación ha cambiado radicalmente para la reconversión de los antiguos depósitos de Pignatelli. El Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) ha visto en solo tres días cómo el primer proyecto que podría considerarse de ciudad que se impulsa desde Urbanismo en el ayuntamiento pasaba del borde del precipicio a la posible unanimidad. Al acuerdo con Ciudadanos (C’s) y CHA se sumó el PSOE el jueves elevando de 58 a 77 el número de viviendas libres que permitir edificar en los suelos que se pondrán a la venta. Y ayer el PP dio una nueva vuelta de tuerca registrando un voto particular en el que ofrece subirse a un carro al que nunca fue invitado si la operación se cierra con una permuta y no con una enajenación. Lo mejor es quenadie lo ve con malos ojos.

Los conservadores dieron un giro a la negociación al anunciar que supeditará su voto a que se apoye su propuesta de una permuta por obra. Es decir, en lugar de subastar los suelos y que se paguen con dinero, que se haga en especie. Así, la empresa compradora costearía la urbanización del parque y todos los equipamientos que incluye el proyecto, como la biblioteca, el pabellón deportivo o el centro de mayores, entre otros. «Así sí que se garantizará que se hagan», indicó el concejal del PP, Pedro Navarro.

Aunque parece que esta opción encaja entre las formaciones, desde C’s manifestaron sus dudas técnicas sobre la propuesta popular. Sí que confirmaron que están de acuerdo con la acordada entre ZeC, PSOE y CHA.

Se trataría de un nuevo giro a un acuerdo que ya ha dado muchas vueltas pero que al menos ya no añade más pisos a los 107 que se permitirá levantará para pagar la obra. Aunque esta supuesta autofinanciación de la reconversión de la pastilla tiene un matiz importante: las 30 viviendas VPA se harán con un crédito de 3 millones de euros qur deeberá pedir Zaragoza Vivienda.