Iker Casillas se ha asomado a la puerta de salida a tres días de que el Madrid vuelva a entrenarse. Su destino podría ser el Oporto, equipo que dirige un conocido suyo, Julen Lopetegui. El problema es la elevada ficha de Iker, un asunto que el equipo portugués pretende zanjar instando al club blanco a pagarla en su totalidad. Mientras, De Gea empezó la pretemporada con el United.