El Real Zaragoza espera anunciar esta semana el fichaje de Rubén Gracia Cani, que tiene una propuesta en firme para jugar las dos próximas temporadas en el conjunto zaragocista. El centrocampista se encuentra libre tras haber finalizado contrato con el Deportivo de La Coruña. En la propuesta que ha recibido por parte del Zaragoza también se le ofrece la posibilidad de pasar a formar parte posteriormente del cuerpo técnico de la entidad zaragocista. En el mes de agosto cumplirá 34 años. Ambas partes son proclives a llegar a un acuerdo para que Cani vuelva a jugar en el Zaragoza.

En el seno del Real Zaragoza crece el optimismo por que el mediapunta aragonés termine de dar el sí a una llegada que ya ha quedado perfilada en los últimos días y que, salvo giro brusco, tiene visos de sellarse a principios de esta semana. Esos son los plazos que se manejan en la SAD, donde primero se contactó con el futbolista y después se abordó la negociación formal con sus representantes, aunque según estos, aún resta una última reunión. En cualquier caso desde la óptica del futbolista el fichaje se ve también factible.

El Zaragoza sabe que la oferta económica no es lo más importante para Cani y el club ha trabajado en seducir al jugador por la parte sentimental, por su corazón zaragocista, y también con un proyecto de ascenso. Cani no quiere regresar para ser un simple reclamo para la afición, ni desea volver para capitanear un Zaragoza que deambule por la zona media de la tabla. En esa labor de convencimiento del jugador se han puesto tanto el director deportivo, Narcís Juliá, como el director general, Luis Carlos Cuartero, y la estrategia ha surtido efecto: desde el entorno del futbolista se admite también ese optimismo en que al final se cumpla su deseo de regresar a la disciplina del Zaragoza. El jugador tenía propuestas de fuera de España, de Estados Unidos y de China, pero no le seducen deportivamente, mientras que tiene el interés de algún equipo de Primera División, pero ahora mismo la oferta que más le atrae es la del Real Zaragoza.