Fabri González decidió ayer abandonar el Huesca, al que llegó el pasado 3 de enero en sustitución de Angel Chamarro, para incorporarse al Almería de Segunda División. "Tengo una oportunidad muy interesante de entrenar a un equipo de Segunda que creo que puede estar en mejores posiciones de las que se encuentra actualmente", aseguró. El técnico gallego se negó a dirigir ayer la sesión de entrenamiento. Jesús Viñuales, presidente oscense, dijo al respecto: "No estoy de acuerdo con su marcha".

Además de Fabri tampoco seguirá el segundo técnico, Mikel Inchausti, que tras el partido ante el Castellón tuvo un enfrentamiento con el delegado y directivo, Víctor Viñuales, y regresó a Huesca por sus medios.