Construir un prototipo de una motocicleta de competición de 250 cc de cuatro tiempos. Ese es el objetivo que un equipo de estudiantes de ingeniería de la Universidad de Zaragoza se ha propuesto desarrollar para presentar al MotoStudent 2015, una competición internacional en la que universidades de todo el mundo luchan por presentar el mejor prototipo del mercado. Los mejores proyectos serán premiados el mes de octubre de 2016 en una prueba que se desarrollará en el circuito de Motorland y donde se pondrán en escena el resto de aparatos presentados por equipos de todos los países.

La competición, a la que la Universidad de Zaragoza ya se ha presentado en anteriores ediciones, cuenta además con la participación de otros grupos de trabajo de Aragón provenientes de las facultades de Alcañiz y Teruel.

Dividido el proyecto en varias fases, el equipo de la Universidad de Zaragoza se encuentra actuamente enfrascado en el diseño de las piezas de la motocicleta y, desde la inscripción que realizaron este mes de mayo pasado, cuentan con casi dos años para poner a punto el prototipo. "Llevamos trabajando desde navidades para adelantar trabajo y ahora estamos en la fase de diseño. Queremos poder empezar a fabricar las piezas cuanto antes", señala Héctor Castrillo, miembro del proyecto de Unizar.

Para agilizar el proceso, los integrantes del equipo, todos estudiantes voluntarios de ingenierías, trabajan integrados en distintos subgrupos donde estudian y desarrollan las diferentes partes de la moto. Héctor Castrillo tiene claro que esa forma de trabajar es "la más adecuada para ofrecer cada uno el máximo en su especialidad. Luego ponemos todo en común y llegamos a conclusiones para ir mejorando", dice.

Para el desarrollo del prototipo el equipo universitario ha calculado que necesitan entre 21.000 y 23.000 euros para sufragar los gastos de inscripción, de material y de uso de las herramientas específicas. Por ello, se ha trabajado en la búsqueda de patrocinadores. "Estamos al 50% de nuestro presupuesto y seguimos trabajando para mejorarlo. Por ejemplo, para invertir en innovación tenemos la idea de recaudar fondos a través del crowfunding", asegura Castrillo.

Motorland, objetivo final

La idea del equipo tutelado por el profesor Francisco Moreno es tener lista la motocicleta un mes antes de la carrera para poder hacer un chequeo general y llegar en las mejores condiciones técnicas. La calificación final de cada proyecto se basará en las puntuaciones obtenidas en la demostración del prototipo de acuerdo al reglamento establecido por la competición, la presentación del proyecto industrial: diseño, cálculos, desarrollo y fabricación; las pruebas de seguridad en banco y la carrera en pista de Motorland. El premio para los ganadores será de 3.000 o 6.000 euros según la categoría. "Nuestro principal objetivo es ir a por la victoria, aprender al máximo y disfrutar de una experiencia que es única para gente que nos queremos dedicar a esto", argumenta Castrillo.