"¡Vamos, vamos, que aquí les podemos hacer daño!". La frase de Sendoa, segundo entrenador del Alavés, retumbó en el entrenamiento de ayer al empezar el trabajo de estrategia a balón parado, señal de la fortaleza del rival en esa tarea y de la conocida debilidad del Zaragoza, donde ayer Víctor Muñoz también incidió muchísimo en la defensa de esta faceta, de los saques de esquina y de las faltas, además de los balones laterales. Mañana se verá si el trabajo de Víctor surte efecto.

"Estamos teniendo alguna dificultad defendiendo a balón parado y tenemos que trabajarlo porque te da o te quita muchos puntos", dijo Ruiz de Galarreta. De hecho, Víctor Muñoz habló a sus jugadores en la sesión para pedirles ensayar la defensa del córner que el otro día supuso el empate del Alavés, donde Porcar, Kiko y Juanto remataron tras un córner en el que Borja Bastón no tiró el fuera de juego. No ha sido el único gol que el Zaragoza ha encajado en la estrategia. Ante el Barça B recibió el primero, obra de Dongou, en un cabezazo en el saque de una falta, si bien había un azulgrana en fuera de juego posicional. Mientras, el origen del empate de Osasuna (De las Cuevas) es un saque de banda.

Y el Alavés, pese a la marcha de Viguera, es fuerte en esa faceta. Fue el propio Viguera el que eliminó el curso pasado al Zaragoza de la Copa en un córner. Esta temporada el Alavés ya ha marcado a Osasuna, por medio del central Migue, tras un saque de falta lateral. Barreiro, con su 1,92, Ion Vélez, ambos delanteros, Manu García, Migue y Laguardia son los jugadores a vigilar en la estrategia.