La constructora zaragozana Conavinsa logró dejar atrás el pasado mes de julio el concurso de acreedores en el que se encontraba desde abril del 2012. Así, el Juzgado de lo Mercantil Número 2 de Zaragoza dio, en un auto fechado el 25 de julio, luz verde al acuerdo previamente alcanzado con sus acreedores, según informó ayer Alimarket. Este acuerdo contemplaba inicialmente una quita del 30% y el pago de la deuda en un plazo de unos cuatro años. La deuda de Conavinsa, que a finales del 2011 se acogió al preconcurso de acreedores, superaba los 24 millones de euros al comienzos de 2012, con unos activos que ascendían a casi 23 millones.

En este tiempo, la constructora del grupo Prainsa ha paralizado algunas de sus obras, aunque también ha seguido desarrollando contratos pendientes, a pesar de haber reducido su plantilla tras haber llevado a cabo un Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Conavinsa facturó 25,93 millones de euros en el 2011, frente a los 57,26 millones que ingresó un año antes, mientras que su plantilla --formada por 95 trabajadores hace dos años-- podría rondar ahora la veintena de empleados.

Respecto al grupo Prainsa, uno de los principales productores de estructuras a nivel nacional, desde el pasado mes de mayo nueve de las empresas que lo componen se hallan en concurso de acreedores. El grupo sigue trabajando en su proceso de reestructuración que le permita garantizar su viabilidad.