La Comisión Europea y Marruecos alcanzaron ayer un acuerdo para la liberalización mutua de los intercambios agrícolas, en el que se establece que el 96% de las exportaciones agrarias tradicionales marroquís se beneficiarán de un acceso preferencial a los mercados de la Unión Europea. El pacto alcanzado favorece también a las exportaciones de la zona euro hacia Marruecos, que tendrán un trato preferencial y aumentarán hasta alcanzar el 62% en productos tradicionales.

Las negociaciones comenzaron en enero del 2001, en aplicación del Acuerdo de Asociación Unión Europea-Marruecos. El nuevo pacto cumple el espíritu del proceso de Barcelona, que prevé la liberalización progresiva de los intercambios de productos agrícolas, según recuerda el Ejecutivo comunitario en un comunicado enviado ayer desde Bruselas.

APERTURA DE MERCADOS "Se trata de un verdadero avance", destacó Franz Fischler, comisario europeo de Agricultura. "El acuerdo alcanzado está bien equilibrado y la apertura mutua de los mercados beneficiará tanto a Marruecos como a la UE. Será sinónimo de aumento de los ingresos para los agricultores de la eurozona", añadió.

En lo que respecta a los tomates, la UE ha ofrecido al reino alauí una mejora en el acceso a sus mercados, aunque "respetando el mandato del Consejo de Ministros", según explicó la Comisión Europea. Fischler aseguró que los productores europeos de tomates "tendrán finalmente una perspectiva clara sobre las condiciones y volúmenes de importación de este producto en la Unión Europea".

CUOTAS FIJAS El acuerdo prevé cuotas fijas de importaciones mensuales de tomates por un importe total de 175.000 toneladas por cosecha entre los meses de octubre y mayo, y una cuota adicional global de 15.000 toneladas que podrá ser utilizada entre noviembre y mayo. Para la cosecha 2003-2004, la cuota de importación de tomates en la Unión Europea será de 175.000 toneladas. El año siguiente, la cifra se elevará hasta alcanzar las 190.000 toneladas, según el acuerdo.

El Ejecutivo marroquí, por su parte, está dispuesto a abrir su mercado de trigo blando procedente de la UE. Estas exportaciones europeas se beneficiarán de una reducción de los derechos del 38% para una cantidad de 1,06 millones de toneladas.

El acuerdo prevé también reducciones de los derechos y un incremento de las cuotas de importación para varios productos agrícolas, en particular la leche y la crema en polvo, aves, huevos, mantequilla, quesos, verduras deshidratadas, guisantes, ajos, patatas, peras, frutos secos, cereales (trigo blanco, arroz y cebada) y aceites vegetales. Ambas partes volverán a reunirse en el 2007 para convenir nuevas etapas de liberalización a partir del 2008.

Este acuerdo, conforme al espíritu del Proceso de Barcelona deberá ser aprobado formalmente por la Comisión Europea y el Consejo de Ministros de la UE.