La editorial Alfaguara no retirará el libro infantil 75 consejos para sobrevivir en el colegio, de la escritora barcelonesa pero afincada en Zaragoza desde hace muchos años, María Frisa, cuya obra defendió ayer ante la avalancha de críticas recibidas en los últimos días.

Tras el revuelo montado en las redes sociales, la editorial comunicó a primera hora de la tarde su decisión al respecto. "Alfaguara aclara que este libro queda englobado dentro de la categoría de obra de ficción. Es un manual redactado en tono irónico por Sara, su protagonista, que da sus particular y mordaz visión del mundo con un marcado tono de humor e ironía (...) esta obra se inscribe dentro de una larga tradición literaria infantil y juvenil, aquella que ha recurrido a personajes que han funcionado a modo de contramodelos y cuyos comportamientos no se han asociado a la apología de actitudes reprobables", asegura la editorial.

Poco después de este anuncio fue la propia María Frisa quien se declaró "consternada por la virulencia de las críticas" y defendió su obra: "Lo que en los últimos días se ha reflejado (...) es una interpretación errónea o malintencionada del libro. Se han sacado frases de contexto y se les ha atribuido una intención de la que carecen, cuando el mensaje que subyace es la importancia de la amistad", aseguró la escritora a través de un comunicado que proseguía de este modo: "Este libro es de ficción, una novela de humor, y en ningún caso es un título de autoayuda o adoctrinamiento (...) No refleja mis opiniones sino los pensamientos de una niña de doce años decidida, egoísta, pero noble, con las incogruencias propias de su edad. La intención es que los lectores se rían con los numerosos errores que comete".

María Frisa señaló, además, que para su libro se ha inspirado en otras obras de la literatura "con sentido del humor y una mirada crítica del mundo que los rodea, como Matilda, Manolito Gafotas o El pequeño Nicolás".

La editorial, por su parte, sí reconoció en su comunicado que el título del libro puede llevar a la "confusión" y puede crear dudas "respecto a su carácter de obra de ficción". Por eso, Alfaguara incluirá a partir de ahora en la cubierta "un topo que indique con total claridad que esta obra pertenece al género de ficción".