El pleno municipal del 24 de mayo del Ayuntamiento de Calatayud aprobó, con los votos a favor de POSE y PAR y la abstención del resto de grupo, adjudicar de forma provisional la gestión indirecta de la nueva estación de autobuses de Calatayud a una empresaria bilbilitana vinculada con el sector del transporte.

Dicha adjudicación se publicará en el Boletín Oficial de Aragón y se abrirá un plazo de 15 días para presentar reclamaciones. Después, volverá al pleno para su aprobación definitiva.

El edificio ya ha sido transferido desde el Gobierno de Aragón al consistorio, pero el adjudicatario definitivo deberá solicitar los servicios de luz, agua y gas, así como contratar al personal necesario para la atención al público y el mantenimiento.

La adjudicación, provisional de momento, se ha realizado según el reglamento de explotación por el que, la entidad explotadora de la estación se compromete a pagar un canon anual de 1.000 euros, con cinco años de carencia. Una vez superado este periodo, la gestora deberá aportar al ayuntamiento bilbilitano un 15% de los beneficios, en caso de haberlos, además del canon anual.

El contrato de adjudicación se firmará por diez años y el ayuntamiento se compromete a asumir hasta un máximo de 15.000 euros anuales de pérdidas, siempre y cuando no se supere el 50% del déficit.

El reglamento de explotación regula tanto la relación de la entidad adjudicataria con las empresas de transporte que operan en Calatayud como con los usuarios, los ciudadanos. Así, la adjudicación incluye el servicio de cafetería, la gestión de los locales comerciales y las taquillas para los transportistas.

Días antes, el 7 de mayo se abrió al tráfico la calle Juan Cruz Melero dando por finalizadas así las obras de acondicionamiento del acceso a la nueva estación de autobuses de Calatayud.

El alcalde de Calatayud, Víctor Ruiz, y el concejal delegado en Tráfico, Federico Llorens, visitaron la obra, realizada por la Junta de Compensación del sector de Margarita y con una inversión aproximada de 350.000 euros. Este tramo de la calle Juan Cruz Melero incluye zonas libres de aparcamiento en los dos carriles y uno adicional, más próximo a la estación, reservado para taxis, bus urbano y estacionamiento para discapacitados, y da acceso al parking subterráneo.