El día 7 en Escatrón, el 8 en La Zaida, el 9 en Alforque, el 10 en Velilla de Ebro, el 11 en Quinto, el 12 en Fuentes de Ebro, el 14 en el El Burgo de Ebro y el 15 en Zaragoza. Este es el calendario que se marcó este año la escuela de animadores en el tiempo libre ´Ilógica´.

Así, 19 educadores de esta asociación realizaron parte del Camino de Santiago en Aragón dentro de un proyecto formativo y educativo especial. Las actividades fueron muy bien acogidas en todos los municipios.

El proyecto se llama ´Canimado´ y este año es el tercer año que se ha realizado, aunque es el primero que pasa por la Ribera Baja, ya que en años anteriores se ha hecho por el Pirineo.

El proyecto consiste en que 19 jóvenes hacen un tramo del Camino de Santiago y en cada pueblo en el que paran y son acogidos, realizan actividades socioeducativas con sus habitantes.

´Ilógica´ es una asociación sin ánimo de lucro que comenzó a trabajar en el año 2000 y que en estos años ha realizado proyectos de todo tipo como colonias urbanas, campos de trabajo, intercambios juveniles, actividades extraescolares y distintos proyectos sociales (más información en www.ilogica.es).

Tanto este proyecto como la asociación han sido reconocidos como la mejor entidad de emprendimiento social juvenil a nivel estatal por medio de un premio otorgado por la Fundación Bertelsmann de manos del Rey Don Juan Carlos I.

Durante el año, la asociación forma monitores y hace animaciones y actividades para niños; con este proyecto se proponen profundizar más en su formación y que mejor para ello que pasar unos días todos juntos practicando lo que más les gusta: hacer animaciones y que la gente se divierta con ellos.

Llegaron a cada uno de los municipios citados sobre las 14 horas y después de comer algo y descansar, a las 17.30, hicieron un teatro de presentación para invitar a todos los del pueblo a la actividad infantil-juvenil por la noche.

A continuación, invitaron a los más pequeños a una nueva actividad, en la que a diferencia de la de la noche, en la que ellos serían los beneficiarios, en ésta ellos iban a ayudar: "trabajar para luego recibir". Cada niño realizó una entrevista en profundidad a uno de sus abuelos o a alguien mayor del pueblo; las preguntas fueron fundamentalmente de su infancia y juventud.

El objetivo era que las dos generaciones más lejanas hablaran y vieran que tienen más cosas en común de lo que pensaban, para que así aprendan a valorarse y los más jóvenes aprendan la historia de su pueblo y sus tradiciones de primera mano.

La intención de ´Ilógica´ es publicar un libro de aventuras ambientado en la zona que completarán con los relatos de los mayores recogidos por los más pequeños incluyendo lugares, historias-