Este gobierno del PP que desprecia e ignora la cultura en general, ahora también la persigue y ha puesto el ojo, que no lee, en los creadores para sancionarlos con multas de pueden llegar, en algunos casos, hasta los 100.000 euros bajo amenaza de retirarles la pensión, directamente. Se ve que tienen ganas de recaudar y han metido prisa a los inspectores de Hacienda para ver si hacen sangre en escritores jubilados que cobran una pensión mísera (dicho sea de paso) después de haber cotizado 40 años por su vida laboral. Son bastantes los afectados, todos nombres conocidos, excelentes creadores que llegados a los 65 años se les castiga por seguir creando, escribiendo espléndidos libros, haciendo magníficas fotografías o películas que pasarán a la historia. Vamos, que si cobras la pensión por tu trabajo profesional desarrollado a lo largo de la vida (el que fuere), y te da por escribir un libro, dar un concierto, preparar un audiovisual, o cualquier actividad intelectual remunerada, por la que además ya pagas al Estado el IRPF correspondiente, pues te quitan la pensión. Los miserables del Gobierno lo consideran incompatible. Como si cada año te encargaran un libro, o te pasaras la vida dando conferencias por el ancho mundo a precios astronómicos, o preparando una película todos los meses. Más bien resulta todo lo contrario: la inmensa mayoría de los creadores cuando se jubilan regalan su trabajo, no cobran por escribir, dar una conferencia sobre su obra, o hacer un audiovisual donde encima ponen sus ahorros. Algo que por otra parte me parece humillante porque todo trabajo debería ser remunerado.
Pero estos señores y señoras del PP no respetan la sabiduría, el conocimiento, la creación, el arte. Solo respetan el dinero. Y ahí están los ejemplos de la vergonzante ley de Amnistía Fiscal para unos cuantos sinvergüenzas elegidos por los dioses de la avaricia. O la admiración y cariño demostrado hacia personajes corruptos que blindan, oportunamente, en los cómodos sillones del Congreso y del Senado para que el aforamiento les impida ser juzgados. Ahí está ese brutal 21% de IVA cultural que grava todo lo que huela a creación, a belleza, a alegría, a talento, a armonía, a felicidad, a emociones. Intocable hasta ahora, como una señal imborrable de lo mezquina que puede llegar a ser la Administración. Soy de la opinión de que la mayor parte del gabinete actual solo respeta la bolsa y el fútbol.
La indignación es tanta en este sector que se ha creado una plataforma para hacer compatible su jubilación con la creación. Han ido a hablar con Patxi López sobre el tema para que cambien la ley. "¿Por qué son compatibles las pensiones con las rentas de capital y no con los humildes derechos de autor, que además cotizan a Hacienda?", se preguntó el presidente del Congreso tras reunirse con los miembros de la plataforma "Seguir creando". Igual es que nos quieren a todos jugando al guiñote en un triste bar o dándole a la petanca en el parque, como en el franquismo.
Periodista y escritora
