33 Y si en Sijena se manifestaban por los bienes del monasterio, en Zaragoza también hubo concentración. En este caso por la autorización para el outlet de Pikolín. Quienes protestaban eran en su mayoría autónomos que tienen su pequeño comercio en la ciudad. Estos empresarios denuncian el grave perjuicio que este outlet va a ocasionar al comercio tradicional de los barrios, que abocará al cierre de tiendas y a despedir a decenas de dependientes. H