Todas las previsiones anuncian buenos registros turísticos en España para Semana Santa y para el puente de mayo, lo que es muy buen síntoma de cara al verano. El incremento de ocupación hotelera en relación al año anterior rondará el 15% para esta semana y podría alcanzar el 20% para el Día del Trabajo. Es verdad que en el 2013 Semana Santa cayó en marzo, menos propicio para los viajes, pero aun así el incremento es muy significativo y marca una clara tendencia de recuperación. Los hoteleros aseguran que será la mejor campaña desde el 2007. De hecho, esta semana abre casi el 80% de los hoteles del país, frente al 50% escaso del año pasado. Los visitantes extranjeros son los que han permitido que el sector mantuviera el pulso con la crisis. Por eso, lo más significativo de los datos de este año es la aportación del turismo interior, que confirmaría la tendencia ya detectada por el Banco de España desde la segunda mitad del 2013 de una lenta y gradual recuperación del gasto de las familias. De seguir así, el sector turístico, el último en sufrir la crisis, podría ser el primero en salir de ella.