Abraham Minero ha vuelto a la disciplina del Real Zaragoza tras haber permanecido el curso pasado cedido en el Eibar en Primera, pero, a pesar de tener dos temporadas más de contrato, sigue sin entrar en los planes del club. El principal problema es la elevada cuantía de su ficha, que ronda los 600.000 euros. Los representantes del lateral no han podido encontrarle hasta el momento acomodo en ningún de Primera en España y ahora están tratando de buscarle equipo en Europa. En España, la UD Las Palmas busca un lateral izquierdo y sus agentes podrían ofrecerlo al cuadro canario, aunque es difícil que pudiera hacerse cargo de la totalidad de su ficha. En Europa están mirando principalmente en Grecia y Turquía, pero es complicado que consigan alguna oferta interesante. El curso pasado el Eibar se hizo cargo de los casi 500.000 euros de su contrato.
Ante ese panorama, los agentes de Abraham y el Real Zaragoza están buscando fórmulas para ver si es posible que siga la próxima temporada en la plantilla. El catalán estaría dispuesto a rebajar su ficha a la mitad (perdonar alrededor de 300.000 euros) para quedarse, pero esa cantidad es todavía muy elevada para el club aragonés en Segunda. El Zaragoza, si no aparece ningún equipo que quiera contar con Abraham pagando su ficha, debe valorar también si le interesa aceptar una propuesta de ese tipo o buscar un club para compartir la ficha del defensa, pero ese caso estaría costeando parte del contrato y no podría contar con sus servicios.
600.000 Y EL EIBAR
La temporada pasada, aunque en principio parecía que no iba a ser así, el Eibar, que había ascendido a Primera, se hizo cargo de la totalidad de la ficha de Abraham. El club vasco no está dispuesto a hacer el mismo desembolso este año (cerca de 600.000 euros). El futbolista y sus agentes han mostrado en todo momento una buena predisposición para alcanzar un acuerdo con el Zaragoza y buscar una solución para la situación del futbolista. Ahora mismo no hay que descartar su continuidad y quizás tenga algo que ver con que se haya truncado el fichaje de Domingo Cisma. Con este último existía un preacuerdo, pero Cisma prefirió no esperar más y fichó por el Córdoba, El cuadro aragonés cuenta ahora para el lateral izquierdo con Diego Rico, pero también puede jugar en ese puesto el uruguayo Leandro Cabrera.
Otro de los jugadores que se encuentra pendiente de abandonar la plantilla zaragocista este verano es el portero Pablo Alcolea. El Ebro, que la próxima temporada militará en Segunda División B, se ha puesto en contacto para ofrecerle a Alcolea la posibilidad de jugar en sus filas, pero, de momento, el guardameta ha preferido esperar para ver si le aparece una oferta de algún equipo de Segunda División. Pablo Alcolea percibe una ficha de 180.000 euros y es posible que el Real Zaragoza se vea obligado a compartir su ficha con otro club para darle salida.
El club aragonés le está poniendo todas las facilidades al portero para que pueda encontrar equipo. Si al final se acaba yendo lo más probable es que lo haga a través de una cesión. La temporada pasada no iba a jugar y después tuvo muchos minutos por las lesiones y los malos momentos de Óscar Whalley, ahora cedido a la SD Huesca, y Bono.
El Real Zaragoza ha fichado ya este verano a Manu Herrera, un guardameta de 33 años y con mucha experiencia, que en las últimas temporadas ha militado en Elche con un buen rendimiento, y ahora pretende renovar la cesión de Bono con el Atlético de Madrid por una campaña más. El portero internacional marroquí se encuentra realizando la pretemporada con el Atlético y esperando a que se cierre el acuerdo entre los clubs para regresar a la plantilla zaragocista. Bono hizo un buen final de Liga el curso pasado y a Ranko Popovic le gustaría seguir contando con sus servicios.
