Acaba el Real Zaragoza en Mendizorroza su trilogía de desplazamientos. Ganó en Pamplona en un triunfo muy sabroso, empató con sabor agridulce en Sabadell y hoy visita al Alavés para sumar una victoria que le acerque más a la cabeza. Ranko Popovic no quiere hacer cálculos, pero Las Palmas no ganó y el Betis derrotó al Girona, por lo que vencer al Glorioso en su feudo acercará, quizá hasta los 5 puntos, a los puestos de ascenso directo, a las posiciones que el serbio no quiere ni mentar para no despistar a los suyos.

Se presenta el Zaragoza en Mendizorroza con el aval de 5 jornadas sin perder, con 13 puntos de 15, y con Bono a las puertas de la leyenda, que supondría estar 6 citas ligueras sin recibir goles, algo que solo han hecho César Láinez y Manolo Villanova, aunque este a caballo de dos temporadas. El marroquí se les puede unir hoy, pero a Popovic tampoco le interesa ese récord, solo mantener el nivel defensivo, el espíritu de bloque y, por supuesto, jugar algo mejor que en la Nova Creu Alta, donde el Zaragoza fue un dolor con el balón. Con esas tres premisas, el equipo asaltará con total seguridad Mendizorroza y ganará. Sí, vencer esta tarde. La única cábala que ve Popovic, poseído por el espíritu del Cholo Simeone.

BORJA Y EL CÉSPED Tiene motivos para pensar así el serbio, sobre todo porque el Zaragoza se vio muy lejos del ascenso directo y, en las distancias largas y con tanto que remontar es mejor no mirar a largo plazo, solo marcarse metas cortas, la siguiente cita en cualquier caso. Y, además, esta Segunda de 42 jornadas es eterna y da tiempo para todo. Hace poco más de un mes, cuando cayó goleado con Las Palmas, el Zaragoza parecía vivir con el playoff como única meta. Ahora, tras 4 victorias y un empate y con 17 jornadas y 51 puntos por delante, el sentimiento es que la promoción está en la mano, aun con la amenaza del sorprendente Leganés, y que todo es posible.

Al Zaragoza, con una plantilla tan corta, le están rompiendo las lesiones, sobre todo musculares. El eterno Rubén, Basha, Jaime, Álamo y Whalley son los inquilinos de la enfermería. Y las molestias de Mario, las de Vallejo, las de Borja, que ayer dio el OK para viajar y que apunta a jugar a poco que hoy tenga buenas sensaciones en el isquiotibial derecho para que Willian aguarde turno... Popovic cruza los dedos y mira de reojo a la enfermería. Hoy, el once espera como novedad a Insa, volverá Galarreta a la mediapunta y la duda es si dará descanso a Vallejo en el eje para que vuelva Rico al lateral y Cabreza juegue con Mario. Si lo que funciona bien no se debe tocar, Vallejo estará en el once.

En Mendizorroza espera un césped en mal estado, blando y con mucha agua, que se irá poniendo pesado con el paso de los minutos por las lluvias caídas y por las que se esperan hoy. Estaba mal también el césped en El Sadar y allí ganó el Zaragoza, que no se aclimató bien al irregular piso de la Nova Creu Alta. En todo caso, el terreno nunca puede ser una excusa.

El Alavés tiene lesionados --Einar, Migue, Galán, Castillo, Beobide y Tejera--, aunque el meta Manu superó la prueba y Alberto recupera a Unai Medina. En el eje formará con dos exzaragocistas, Jarosik y Laguardia, y la consistencia atrás es la mejor virtud del Alavés actual, que colecciona 277 minutos sin encajar. Claro que el Zaragoza lleva 454. Se diría que el que marque, ganará.... El Alavés no es muy fuerte en casa, donde ha dejado escapar 19 puntos, pero Mendizorroza no se le da muy bien al conjunto zaragocista, aunque la historia no juega. Solo el presente, salir y ganar. Y, tras hacerlo, mirar la tabla y pensar en el Llagostera. Así lo quiere Popovic...