La Semana Santa en el Bajo Aragón siempre está cargada de sentimientos. A flor de piel. Pero este año ha habido más y más tristes. Los pueblos de la Ruta del Tambor y el Bombo han tenido muy presentes los sucesos del pasado mes de diciembre en Albalate y Andorra, en este último pueblo fueron asesinados dos guardias civiles -- Víctor Romero, natural de Calanda, y Víctor Jesús Caballero, y el ganadero José Luis Iranzo. Ambos eran activos participantes y como tales han estado en el recuerdo de los miles de cofrades bajoaragoneses y en un edificio de la plaza de Andorra, en fotografía.

Con el nerviosismo propio de las personas que viven la tradición desde niños, las plazas de Albalate, Alcorisa --que contó con la presencia de la consejera Mayte Pérez--, Andorra, Híjar, La Puebla de Híjar, Samper de Calanda y Urrea-- se fueron llenando cerca de la medianoche a esperar el gesto --en general la vara del alcalde-- que rompe el silencio en favor del estruendo. Lo que marca el paso de la vida a la muerte de Cristo.

Miles de tambores, timbales y bombos, al unísono, rasgaron el cielo en el Bajo Aragón. Bajo la luna llena. Como al unísono se uniforman, sin emblemas de cofradías ni hermandades para ser uno en el grito. Solo Calanda pospone el rito al Viernes Santo.

La Semana Santa bajoaragonesa, declarada fiesta de Interés Turístico Internacional desde el año 2014, combina las procesiones y el recogimiento con el ambiente festivo.

«Los que estamos fuera, volvemos para cumplir con la tradición. Y traemos amigos para darla a conocer. Algo gordo tiene que pasar para que se falte», aseguraba César, alcañizano de origen, pero «de la Ruta, en estas fechas».

Este sentimiento era corroborado por Julia Vicente, alcaldesa de Alcorisa, quien indicaba que en Semana Santa todas las casas del pueblo están abiertas, para los que vuelven a casa y para los visitantes.

Pendientes de que las tamborradas turolenses sean declaradas patrimonio de la Humanidad por la Unesco, la Ruta ya cuenta este año con un nuevo atractivo: la inauguración de un museo propio en Híjar, que ayudará a comprender y a interpretar la esencia de la Semana Santa bajoaragonesa. El centro, interactivo, fue inaugurado la pasada semana.

De momento, y hasta el Domingo de Resurrección, el estruendo se ha apropiado de los pueblos de la Ruta, a los que se unen hoy, a las 12 del mediodía, los calandinos. La directora de cine Paula Ortiz y la actriz Luisa Gavasa, ambas zaragozanas, serán las encargadas de dar el primer toque.