Puede que pocas jóvenes desearan tanto como Jenna y Barbara Bush celebrar su 21º cumpleaños. Y es que con la mayoría de edad que alcanzaron ayer, las hijas del presidente de Estados Unidos se han quitado de encima el enorme peso de ver reflejados en todos los medios sus escarceos, hasta ayer ilegales, con el alcohol, y que les ha llevado varias veces ante el juez.