Aunque Aragón no tiene playa esto no impide la presencia de turistas durante todo el año gracias a los once municipios que forman parte de la lista de los pueblos más bonitos de España, a la variedad de actividades deportivas que se pueden realizar tanto en verano como en invierno, especialmente por la nieve, o a su amplio patrimonio cultural. Pero este año hay que añadir Teruel, que se ha estrenado como uno de los destinos turísticos más reclamados gracias a la inversión realizada en grandes proyectos como Motorland, Dinópolis, la Baja Aragón, la promoción de su gastronomía o al 800º aniversario de los Amantes.

El turismo en Aragón está en auge y los datos confirman que ha crecido hasta un 8% en el primer semestre del año. El umbral por el que se mide en la comunidad la mayor afluencia o no de visitantes está en el 2008. Se celebró la Expo del Agua y la comunidad recibió a más de tres millones de visitantes. Luego llegó la crisis...

En estos ocho años, la afluencia de turistas ha sido oscilante, aunque el pasado año se se superaron las cifras del año Expo y este verano se prevé «una ligera tendencia al alza», explica Jorge Marqueta, director gerente de Turismo de Aragón.

Y lo muestra que la provincia de Teruel haya sido visitada, hasta el momento, por un 15% más de turistas que en el mes de junio del año anterior y Huesca y Zaragoza han incrementado sus cifras un 8%. Los datos en cuanto a pernoctaciones también son positivos; de nuevo es en la provincia turolense donde más han aumentado, un 15%, en Huesca un 11,6 y en Zaragoza casi un 5%.

PERNOCTACIONES

«En Teruel se nota la recuperación económica en el turismo», indica Juan Ciércoles, presidente de la Asociación Teruel Empresarios Turísticos, quien destaca que uno de los objetivos establecidos es «conseguir que los viajeros pasen más de dos días en la provincia». Para ello, la idea es promocionar los paquetes turísticos, las excursiones organizadas por las que se pueden conocer diferentes municipios, «a la vez que puedes visitar Albarracín, pasas por el museo de aceite de Matarraña», añade.

Este mismo objetivo se busca en la capital aragonesa, tradicional ciudad de paso entre Madrid y Barcelona. El vicepresidente de la Federación de Empresarios de Hostelería (Horeca), Luis Manuel Sánchez, asegura que Zaragoza «ya no es una ciudad de paso, es para disfrutarla y para vivirla, ese es el objetivo». Sin embargo, los hosteleros no coinciden con esta afirmación.

La opinión generalizada de los establecimientos más próximos a la plaza del Pilar --que sigue siendo el principal foco de atracción turística-- es que «la afluencia es menor que el año pasado». Además, «la gente visita la ciudad cuando va de camino a Madrid o Barcelona y solo está aquí unas horas. Hay menos afluencia que el verano pasado», confirma un trabajador del restaurante La Imperial.

«No sabemos si habrá más visitantes, pero nosotros no lo notamos, además van a lo barato y el gasto es mínimo», aseguran camareros del restaurante Las Catedrales. Solo unos pocos afortunados como el bufet Las Palomas o El Ciclón son rotundos a la hora de expresar que los datos son favorables. «Estamos muy bien situados y a los turistas les gusta comer de bufet por la facilidad», asegura Yuma Vivaldo, encargada del establecimiento.

Este es otro de los objetivos del plan de turismo que la capital aragonesa quiere poner en marcha: que los turistas estén más tiempo y gasten más. Y para ello el sector se esfuerza en vender nuevos productos.

Huesca y Teruel ya ofrecen nuevas posibilidades que atraen a los visitantes a permanecer más de un día. Y en esto tienen mucho que ver las experiencias.

Los viajeros ya no buscan ver un solo lugar o realizar una actividad concreta. «La manera de entender el turismo ha cambiado, ahora todo gira en torno a experiencias y emociones», asegura Marqueta. Un ejemplo es el denominado turismo astronómico que se desarrolla principalmente en la zona de Javalambre (Teruel).

La contaminación lumínica de este territorio es practicamente inexistente por lo que en 2013 se fundó el Observatorio Astronómico, ubicado en el municipio de Arcos de Salinas. Para explotar esta actividad se inició el proyecto Galáctica en el mismo municipio, que se encargará de la difusión y la práctica de la astronomía para transmitir y enseñar las investigaciones que se lleven a cabo en el observatorio.

«Cuando esté abierto será un centro de referencia casi a nivel estatal porque no hay una cosa parecida que se conozca», afirman en la zona.

El deporte en la montaña también es un atractivo para los turistas, lo que convierte al Pirineo en uno de los puntos más frecuentados, pero se buscan novedades. Y en ese capítulo habría que destacar el turismo de ibones, los lagos pirenaicos que están teniendo una considerable aceptación por su valor paisajístico, científico y cultural y su escasez en la Península Ibérica, o el turismo ornitológico, de observación de aves en su entorno natural.

La empresa de turismo de aventura de la Sierra de Guara ha tenido este puente de agosto una elevada ocupación, incluso llega al «overbooking». Las actividades más destacadas son el senderismo, el montañismo y la bicicleta todo terreno (BTT).

Hasta el final del verano no se conocerán los datos definitivos, pero por el momento parecen mostrar una tendencia al alza.s en gran parte a la gran variedad de espacios naturales y al turismo rural. Tres de cada cuatro municipios de Teruel disponen de casas rurales, entre ellos los 11 pueblos que forman parte de la lista de los más bonitos de España.