Nobert Feher salió ayer del juzgado de Alcañiz como había llegado, rodeado de un apabullante dispositivo del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil con base en el barrio zaragozano de Casetas, aunque a su salida camino de Teruel le acompañaron también los insultos y los gritos de ¡asesino! del puñado de personas que rodeaban el edificio.

Poco antes de las 18.00 horas, con la rápida salida de los furgones del grupo de élite, terminaban más de diez horas de atenta espera por parte de numerosos medios de comunicación. Varios de ellos italianos, ya que la psicosis que llegó a crear Feher, más conocido allí como Igor el Ruso, le sigue haciendo uno de los temas de más interés en el país transalpino.

Buena prueba de ello es el equipo de diez enviados especiales enviados por los distintos canales de la radiotelevisión pública RAI, varios de los cuales estuvieron en los juzgados alcañizanos, con periódicas conexiones para su canal 24 horas. También otros canales privados enviaron equipos, y lo estrecho del espacio para posicionar las cámaras de fotos y vídeo causaron algún momento de tensión, pero no llegaron a dañarse las relaciones internacionales, al menos en la prensa.

Tampoco parece que lo vayan a hacerlo las judiciales, ya que Feher, tras un contacto por videoconferencia con la jueza Carmen Lamela de la Audiencia Nacional, aceptó ser extraditado a Italia para ser procesado allí por los asesinatos y robos que le imputan. El formalismo, derivado de la Orden Europea de Detención que Italia dictó contra él tras perder su rastro el pasado mes de abril, facilitará que así lo haga en un futuro, pero primero tendrá que ser procesado por los tres asesinatos y los dos intentos de homicidio en España. Lo que no se descarta en que algún momento del proceso sea trasladado a Italia para ser juzgado allí, aunque luego retorne, según explicó el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA).

La dimensión internacional de la carrera delictiva de Feher es aún mayor, ya que antes de comenzar a delinquir en Italia ya le constaban órdenes de búsqueda internacional en Serbia, por violación, según detallaban ya anteayer los enviados especiales italianos en Alcañiz. Ayer, a las puertas del juzgado, se rumoreaba que uno de los motivos del retraso en hacer efectivo el encarcelamiento era que la jueza debía enviar comunicaciones a todos los juzgados internacionales que le reclaman, y que serían numerosos a juzgar por los ocho países que reconoce haber recorrido.

RECORRIDO

La investigación española se cruza con la italiana para reconstruir los pasos de Feher desde que se le perdió la pista el pasado 8 de abril, después de asesinar a un forestal y dejar malherido a otro que le pararon en el coche, siete días después de haber asesinado a un hostelero. Hasta Alcañiz se desplazó ayer una delegación de los Carabinieri, uno de los cuerpos policiales italianos. Uno de los oficiales explicaba a los medios que el fiscal italiano ha pedido la extradición, pero dependerá del citado acuerdo entre autoridades.

También informó que se trata de esclarecer si alguien le ayudó a llegar desde Italia hasta España, donde según dijo él mismo lleva desde septiembre. Los agentes indagan su recorrido, y algunas fuentes apuntan a que pudo entrar en el país por Gerona.