Los pediatras están convencidos de que no hay motivo alguno para encender la alarma en Aragón ante la posible aparición de más casos de enterovirus. "A las familias hay que mandarles un mensaje de tranquilidad. Es verdad que no hay vacunas para los enterovirus, pero también que la inmensa mayoría de ellos desarrollan sintomatología y afecciones habituales y leves", recalcó Isabel Lostal, pediatra de Atención Primaria del centro de salud Actur oeste. La profesional admite la complejidad de la cepa notificada en Aragón y que también ha afectado a al menos una niña en Cataluña causando, en ambos casos, problemas neurológicos, pero traslada que "no hay ningún brote agudo en la comunidad". En todo caso, aboga por las medidas de prevención habituales, entre las que incluye el lavado de manos, evitar el contacto con otros niños o extremar las precaucaciones. "No hay que dejar en cualquier superficie los pañuelos que haya podido usar un niño que presente cuadros de diarrrea, vómitos o gastroenteritis", añade.