Dijo ayer Javier Lambán que el nombre de Amancio Ortega «va vinculado a la llegada de buenas noticias» para Aragón. Recordó así que hace ya más de 15 años el empresario gallego apostó por Zaragoza para ubicar aquí la segunda planta de distribución de Inditex. «Esa inversión sirvió de detonante de las magníficas posibilidades de la logística en Aragón», reconoció Lambán, quien no pudo ocultar su «gran satisfacción» por la donación recibida para la sanidad pública.
La presencia de una parte del imperio de Ortega en la comunidad también repercute en el aeropuerto de Zaragoza, donde más de 80% de los movimientos de carga son de Inditex y Zara, la marca principal del gigante textil. Lambán le insistió al vicepresidente de la fundación que le transmitiera sus «muy sentidas» palabras de agradecimiento.
El discurso del presidente de Aragón se ha venido repitiendo en las últimas semanas por parte de otros mandatarios de diferentes comunidades, ya que la iniciativa de Ortega ha llegado a toda España. País Vasco, Asturias o Comunidad Valenciana ya han hecho efectivas sus firmas. Y es que esta donación de dinero para la compra de equipamiento de radiología oncológica nació hace años en Galicia, tierra natal de Ortega, pero este año se ha hecho efectiva a todas las autonomías con un montante total de 320 millones.
Impacto en el entorno
Su acción filántropica ha sido alabada por muchos; pero también criticada por otros. El vicepresidente de la Fundación Amancio Ortega Gaona, José Arnau, explicó que la iniciativa «responde a la voluntad personal y a los principios» del empresario gallego de «generar impacto en su entorno, con la generación de empleos estables», dijo.
«Estos han sido clave de su éxito empresarial, le han permitido crear su fundación y colaborar con uno de los pilares básicos del Estado del bienestar, como es la salud», añadió Arnau. «Es una aportación que generará mejoras sensibles a largo plazo y muy relevante por la acción sanitaria que conlleva. Estamos encantados de acelerar los planes de modernización en Aragón de sus equipos radiológicos», apuntó Arnau.
