Algunos de los testigos que se habían colocado en el edificio para comprobar si la estructura seguía cediendo se han resquebrajado tal y como se puede observar en la fotografía inferior. Este sistema consiste en unir los dos extremos de una grieta con escayola o yeso, de modo que si se rompe de nuevo permite detectar nuevos movimientos en la estructura. La imagen de arriba muestra el apuntalamiento que se está realizando en el garaje para compensar la tracción de las vigas que han sido descalzadas.