Al ritmo de tambores, timbales, bombos y cornetas, la hermandad del Cristo Resucitado cerrará hoy las procesiones de Semana Santa con el acto del Encuentro Glorioso, en el que los cofrades celebran, en plena plaza del Pilar y a cabeza descubierta, la alegría de la resurrección de Jesucristo.

Esta hermandad, fundada en 1976 por los Padres Agustinos y por algunos de sus alumnos, es una de las más jóvenes de la ciudad, aunque ya cuenta con un buen número de adeptos que acuden, sobre todo, a la procesión del día de hoy, la titular de la cofradía. Con su túnica blanca y su tercerol azul claro, que tanto recuerda a los de cola de dragón utilizados en el Bajo Aragón, los miembros de la hermandad pasearán o sus dos pasos, el Cristo Resucitado (1976) y el del nuestra Señora de la Esperanza (1980), ambos de Jorge Albareda, en un recorrido de ida y vuelta desde el colegio de los Agustinos.

La cita obligada es, por supuesto, en la plaza del Pilar, donde la seriedad y la sobriedad de la Semana Santa zaragozana se despedirá, hasta el año que viene, a ritmo de tambor.

Por otra parte, la Semana Santa de Zaragoza estará representada hoy en Madrid por la cofradía de la Oración del Huerto, que participará en la procesión de la Soledad.

Esta hermandad participó ayer sábado en la Vigilia Pascual, acompañando al arzobispo de Zaragoza, Elías Yanes, en un recorrido que discurrió entre el palacio arzobispal, en la plaza de La Seo, y la basílica del Pilar.

PROCESION DE LA SOLEDAD A lo largo de la jornada de ayer, la actividad religiosa en las calles estuvo protagonizada por la hermandad de San Joaquín y Nuestra Señora de la Virgen de los Dolores que, con la procesión de la Soledad recorrió las calles de Zaragoza en la madrugada, y la Congregación de Esclavas de María Santísima de los Dolores. Esta congregación, compuesta sólo por mujeres, se fundó en 1866.

Pero sin duda alguna, la mayor concentración de cofradías en la calle tuvo lugar el Viernes Santo. Las 23 cofradías zaragozanas conformaron el único Vía Crucis completo que existe en España, acompañadas de miles de zaragozanos y visitantes que, pese al frío, abarrotaron las calles del recorrido. Los pasos y el retumbar incesante de tambores y bombos tomaron las calles del centro de la capital aragonesa, durante más de seis horas.

La Procesión del Santo Entierro cuenta con la participación de todas las hermandades y los más de 15.000 cofrades, encabezados por los de la Sangre de Cristo. Esta cofradía es el único día que saca su imagen del Cristo Yacente (conocido popularmente como la Cama ), un anónimo del siglo XVII del que se dice que estuvo postrado a los pies de la Virgen del Pilar durante la Guerra de la Independencia.

La Semana Santa zaragozana, declarada de interés turístico nacional, ha contado este año con varias novedades. La más llamativa ha sido la transmisión en directo, a través de Internet, de la procesión del Santo Entierro, a su paso por la plaza del Pilar.