El subdelegado del Gobierno en Huesca, Ramón Zapatero, se reunirá el martes con los alcaldes de Sabiñánigo, Orna de Gállego y Hostal de Ipiés con el fin de estudiar las medidas a poner en práctica para mejorar la seguridad vial de este tramo de carretera. El encuentro tendrá lugar tras el anuncio realizado por los vecinos de Hostal de Ipiés y las localidades cercanas del corte de la N-330 que tienen previsto llevar a cabo el 4 de diciembre entre las doce y la una de la tarde para reclamar una solución al peligro que plantea el paso de esta carretera por dicha población.

Los vecinos han solicitado en múltiples ocasiones que se tomen medidas para limitar la velocidad en este tramo y que se prohíba el adelantamiento, entre otras medidas como la colocación de semáforos reguladores y badenes.

A principios de septiembre los vecinos remitieron una carta firmada por más de 200 habitantes de la zona a responsables de distintas instituciones entre las que se encontraba el Ministerio de Fomento y la Dirección General de Tráfico.

ASFALTADO DE LA A-136 Por otro lado, el departamento de Obras Públicas del Gobierno de Aragón ha invertido cerca de 4 millones de euros en el asfaltado y la mejora de la carretera A-136 entre las localidades de Biescas y Formigal, según explicó ayer el consejero de Industria, Arturo Aliaga, durante una comparecencia solicitada por el PP en las Cortes.

Los trabajos de mejora desde Formigal hasta la frontera francesa se han interrumpido ante la imposibilidad de ejecutarlos durante la temporada invernal y se retomarán el próximo año, precisó el consejero.

Aliaga indicó que, para desarrollar estos trabajos, los técnicos de su departamento mantuvieron reuniones con el Ayuntamiento de Sallent de Gállego, la Comarca del Alto Gállego y los comerciantes de la zona y, aunque el corte de la carretera estaba previsto el 23 de agosto, se trasladó al mes de octubre para "no dañar al sector turístico".