Representantes de los trabajadores en huelga y de la empresa EOPV-Excavaciones, que lleva a cabo las obras del tramo Calamocha-Romanos de la autovía entre Teruel y Zaragoza, pidieron ayer ayuda al consejero de Obras Públicas, Javier Velasco.

En una reunión mantenida en Teruel, ambas partes solicitaron al consejero su mediación para superar la situación de conflicto, que afecta a unos 50 operarios. Francisco García, representante de los trabajadores, informó tras la cita que el consejero se había remitido a Fomento, de quien depende la obra. Los trabajadores recibieron su último salario el pasado 8 de octubre, cuando cobraron la mensualidad de septiembre.

Por su parte, el responsable de la empresa EOPV-Excavaciones, José Martínez, explicó que la UTE que recibió la adjudicación de este tramo de la autovía por parte de Fomento tiene pagos pendientes por unos 3.000.000 de euros. Informó de que EOPV es subcontratista y que todo este asunto se ha generado por el intento de la empresa a la que el ministerio adjudicó la obra de cambiar la subcontrata con otra empresa.

Martínez explicó que al no cobrar los trabajos no puede afrontar pagos de los leasing de maquinaria, proveedores, salarios, impuestos a la Hacienda Pública o la Seguridad Social.

Javier Velasco dijo que pedirá al secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlan, que intervenga y medie en el conflicto laboral.