Ocho patrullas de la Policía Local de Zaragoza controlarán hoy de manera permanente el tráfico en las calles Azoque y Pignatelli para informar a los conductores de los cambios en la circulación que se introducen en ambos viales.

A partir de las ocho y media de la mañana, se invierte el sentido de la circulación en la calle Azoque de forma que desde Capitán Portolés se podrá ahora girar tanto a la izquierda (hacia la plaza Salamero) como a la derecha (hacia Bilbao). Una hora más tarde, sucederá lo mismo en la calle Pignatelli, en el tramo comprendido entre César Augusto y Ramón y Cajal.

Desde primera hora de la mañana habrá en la zona una notable vigilancia de la Policía Local para indicar las nuevas trayectorias a los conductores. En concreto, trabajarán en el sector un responsable de la Unidad de Motoristas y dos patrullas de la Policía de Barrio del distrito Centro. Una, en el entronque de la plaza de Salamero con la calle Azoque y otra junto a Capitán Portolés. También estarán operativas dos patrullas de Protección Ciudadana en los accesos de César Augusto y en la plaza de Salamero.

A las nueve y media, se invertirá el sentido en calle Pignatelli, entre Ramón y Cajal y César Augusto. La entrada se realizará ahora por Ramón y Cajal y la salida, por César Augusto. En este punto también se organizará un dispositivo de control de la Policía Local. En concreto, dos patrullas de Motoristas se ubicarán en la intersección de César Augusto y Morería, y otras dos patrullas en Pignatelli y Conde Aranda.

DESCONGESTIONAR Las modificaciones que se introducen en la zona centro de Zaragoza para aliviar la intensidad de la circulación continuarán con la ampliación a dos carriles de la circulación en la calle Bilbao, que se conseguirá eliminando el estacionamiento en línea actual en el tramo más próximo a la calle Albareda. Esta medida será efectiva en el entorno de la Semana Santa.

A continuación, se eliminará el giro a la izquierda desde César Augusto hacia plaza de Salamero. Los conductores que quieran acceder al aparcamiento subterráneo de la glorieta tendrán que utilizar la entrada situada un poco más adelante en la misma avenida, delante del hotel Meliá.

Paralelamente, la empresa adjudicataria del estacionamiento (Epsa) deberá realizar una pequeña modificación en la salida del párking subterráneo de la plaza Salamero para llevarla junto a la calle Morería. Desde allí, los coches se podrán incorporar sin peligro a la avenida César Augusto a través del nuevo semáforo colocado en ese punto.

El concejal de Movilidad Urbana, Jesús Sarría, confía en que estas medidas sirvan para mejorar la fluidez del tráfico en una zona que ha absorbido la mayor parte del flujo de coches que antes circulaba por el paseo Independencia.