Los colapsos que se han sucedido durante las últimas semanas se repitieron ayer en los servicios de Urgencias del Royo Villanova y el Miguel Servet. Ayer a mediodía en la Casa Grande una decena de pacientes en camilla se encontraba en las salas habilitadas en los pasillos al no tener camas libres para poder atenderlos en las salas de observación --este servicio dispone de tres-- o en planta. En el hospital de la Margen Izquierda, la ocupación al cien por cien provocó retrasos de más de un día en los ingresos y las consiguientes quejas de los usuarios.

Estos episodios de saturación se suman a los que ha padecido el Clínico en los últimos días, que ha llegado a tener decenas de camillas ocupadas en los pasillos al no dar abasto. La dificultad de conjugar el incremento del número de operaciones --que ocupan las camas de las plantas-- con los ingresos procedentes de las atenciones urgentes ha llegado ya también a otros centros sanitarios como el Servet, que usa dos oquedades de los pasillos como salas de observación complementarias --de hecho el personal ya las llama las salas 4 y 5-- hasta que se pueden liberar camas para trasladarlos.

BIOMBOS

Ayer, una de ellas se encontraba al completo. Nueve pacientes estaban siendo atendidos en una de estas salas en camilla y, de hecho, se instalaron varios biombos para tratar de preservar su privacidad. Otra camilla se encontraba en la segunda sala del pasillo junto con media docena de sillas de ruedas. La mayoría de ellos estaba esperando el resultado de pruebas diagnósticas.

Además, el hospital Royo Villanova también estuvo al cien por cien de su capacidad, lo que provocó que algunos de los pacientes esperasen más de 24 horas para que el centro hospitalario les destinase una cama en planta. Todas las plazas de las salas de observación también estuvieron a tope, aunque, según detalló un trabajador del hospital "ninguno de los pacientes se quedó sin una cama en la que pasar las horas de espera".

"Desde primera hora de la mañana (de ayer) se han empezado a dar altas, por lo que los pacientes en observación han ido ocupando sus camas en planta poco a poco", señaló este trabajador. Las esperas de 12 o 24 horas para pasar a las habitaciones "suelen ser casos puntuales", matizó.