El nuevo consejero de Política Territorial e Interior del Gobierno aragonés, Antonio Suárez, ha anunciado que emprenderá una política de ajustes competenciales en las comarcas para dotarles de "mayor musculatura" y garantizar que su finalidad principal sea la prestación de servicios. El titular de Política Territorial ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación tras jurar su cargo junto al resto de miembros del gabinete de la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, en un acto protocolario celebrado en la sede del Ejecutivo aragonés. Suárez ha destacado que el "reto básico" que se plantea al frente de su departamento es ayudar a los municipios a fortalecerse en la actual situación de crisis, y acometer "reformas y ajustes" con el objetivo de mejorar y potenciar su gestión. Con el ajuste competencial proyectado, el consejero se plantea como finalidad que las comarcas "sean entidades cuyo objetivo principal sea la prestación de servicios de una manera cercana a los ciudadanos". Ha insistido en la necesidad de "corregir algunos desajustes" en el funcionamiento de las comarcas, pero ha subrayado que las reformas previstas se dirigen a dotar de "musculatura" a estas entidades supramunicipales, a fortalecerlas y conseguir una mejor prestación de servicios.