El quiosco del parque de San Pablo salió ayer a concurso. Se trata de la única terraza que no se renovó su licitación en el 2008, con motivo de la Expo, como sí sucedió con el resto de estas infraestructuras a orillas del Ebro. En su momento, el dueño prefirió agotar el tiempo de concesión, que acababa en el 2011, y realizar las mejoras que el consistorio zaragozano le exigía. La sociedad municipal encargada del desarrollo posterior a la Expo solicitó ayer la aprobación del pliego de condiciones para regir el procedimiento para la concesión de esta infraestructura.

La duración de la concesión será de quince años, un tiempo más reducido con respecto a las adjudicaciones que se hicieron en el 2007. El canon que deberá pagar el nuevo propietario es de 8.000 euros anuales que variarán en función de los beneficios que obtenga con su explotación.

El ayuntamiento calcula que será necesario hacer una inversión mínima de entre 30.000 y 40.000 euros. Este coste se destinaría básicamente a "adaptar la infraestructura a la normativa actual", como explicó a este diario el responsable de Parques y Jardines, Jerónimo Blasco. Esta norma incluye cláusulas con respecto a las personas de movilidad reducida o a la obligatoriedad de contar con un baño particular. "Aunque si hubiera ofertas que planteen una mayor inversión para realizar más mejoras en la terraza sería lo mejor", apuntó Blasco. Dado que en un principio las reformas a realizar son menores, Jerónimo Blasco estima que el quiosco podría reabrir sus puertas para la próxima temporada, "si bien podríamos permitir abrir de manera provisional en primavera con tal de que las obras sigan adelante", especificó.

Se trata de una pequeña terraza situada en el parque San Pablo (paseo Echegaray) que siempre se ha caracterizado por organizar actividades relacionadas con el barrio.