El cuerpo de Bomberos de Zaragoza recogió en la madrugada de ayer una cría de alcaraván, una especie de ave corredora de color verdoso con llamativos ojos grandes de color amarillo y largas patas de igual color que llega a medir 46 centímetros.

El ejemplar fue entregado por una pareja, a la que el ave cayó encima de su coche. Después de que los propios bomberos procedieran a su cuidado, también ellos se encargaron de las pertinentes gestiones para entregar el alcaraván al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre La Alfranca, que se hizo cargo del animal.