Aragón y La Rioja cooperarán en mejorar la gestión urbanística para el desarrollo de ambos territorios, intercambiando conocimientos para la redacción y aplicación de la normativa urbanística, en especial de suelo no urbanizable, dada la proximidad geográfica y las similitudes físicas y sociales.

El objetivo es compartir experiencias que redunden en la implantación de actividades industriales, económicas o agrarias en este tipo de suelos para favorecer el desarrollo y la riqueza de los territorios.

Ese es el eje de una declaración que hoy han firmado los consejeros de Obras Públicas de Aragón y La Rioja, Rafael Fernández de Alarcón y Antonio Burgos, quienes también han tratado sobre otros asuntos compartidos por ambas comunidades, entre ellos la necesidad de desdoblar la N-232, por seguridad pero también para el desarrollo socioeconómico en el caso de La Rioja, al ser su eje principal de comunicación.

Fernández de Alarcón ha recalcado que la conversión en autovía de la N-232 es el "número uno" de las prioridades en carreteras del Gobierno de Aragón, pero ha considerado que no es preciso que las dos comunidades hagan un frente común para reivindicar el desdoblamiento ante el Ministerio de Fomento, porque éste "está convencido" de que tiene que desarrollar esa infraestructura.

La mayor gestión que estamos haciendo, ha agregado Fernández de Alarcón, son los convenios con Avertis para bonificar el tránsito de vehículos por la AP-68 y reducir así el tráfico y la siniestralidad en la N-232.

"Las dos administraciones estamos impulsando la conversión en autovía de la N-232", ha subrayado Burgos, quien ha insistido en que ven "sensibilidad" en el Ministerio de Fomento hacia esta petición y en que lo importante es "ir dando pasos" en la ejecución de la infraestructura.

Fernández de Alarcón se ha referido además al corredor ferroviario Cantábrico-Mediterráneo, que es "fundamental para el desarrollo económico de La Rioja y de Aragón", y que será objeto de la firma de otra colaboración entre las dos comunidades para su desarrollo.

Otra de las cuestiones de las que han tratado es la próxima firma de los respectivos planes de vivienda centrados en el alquiler y la rehabilitación con el Ministerio de Fomento, que el caso de Aragón supone un importe global de 40 millones de euros.

Sobre este asunto, Burgos ha apuntado que es de interés para las dos comunidades que las actuaciones vayan en la misma dirección para sacar el máximo provecho de cara a los ciudadanos, que conviene impulsarlo cuanto antes y que espera que los convenios con el Ministerio se firmen lo antes posible.

Además, ha considerado que la vivienda social no está suficientemente recogida para las necesidades que existen y que los gobiernos autonómicos están haciendo un "esfuerzo" para complementar el plan desde el punto de vista social.

En cuanto a la colaboración en materia urbanística, Aragón y La Rioja buscan compartir criterios y buenas prácticas de gestión también en la tramitación de los procedimientos administrativos para la aprobación, modificación y revisión de instrumentos de ordenación y planificación urbanística.

Además, la declaración promueve el intercambio de aplicaciones informáticas para optimizar un mejor desarrollo de servicios de administración electrónica en materia de urbanismo y suelo.