Los familiares aún buscan "la verdad" del Yak-42

El monumento que Zaragoza dedicó a las víctimas del Yak-42, el avión ucraniano que se estrelló en Turquía con un balance de 62 militares españoles muertos, fue ayer escenario de un acto de homenaje a las víctimas, con motivo del undécimo aniversario de la tragedia. Medio centenar de personas se dieron cita en el memorial, así como el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, que acudió a mostrar su "afecto y cariño" a los familiares y a apoyarlos en su búsqueda de "la verdad".

Los concentrados, que guardaron un silencio y depositaron 62 velas y varios ramos de flores en el monumento, aseguraron que seguirán "luchando" para que la verdad se abra camino. Así lo expresó, en la lectura de un manifiesto, Miguel Ángel Sencianes, presidente de la asociación de víctimas del Yak-42, que se refirió a las múltiples irregularidades del "vuelo ilegal" que sufrió el accidente cuando regresaba de recoger tropas españolas de Afganistán.

Granada Repollés, hermana de una de las víctimas y secretaria de la organización de familiares, indicó que el asunto se encuentra en la actualidad ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, en Estrasburgo. "Ya sabemos la verdad", aseguró, para añadir que son los tribunales de justicia los que deben dar validez a la versión real de lo que pasó.

Repollés afirmó que, 11 años después del accidente, todavía se está pendiente de saber qué fue de los 100.000 euros que la se perdieron en la larga maraña de contrataciones que llevaron hasta la aerolínea ucraniana. "Lo que queremos es que se sepa la verdad y que esto no le vuelva a pasar a nadie", declaró.

Además, la secretaria de la asociación de familiares subrayó que todavía no se han percibido las indemnizaciones de la empresa del avión, Chapman Freeman, que hasta hace poco "recurría todas las sentencias" favorables a las víctimas, todas hasta ahora.

Por su parte, Sencianes recordó que los afectados del Yak-42 han promovido la unión de familiares de víctimas de grandes catástrofes en España, entre ellas la del avión de Spanair.