Los abogados Cristina Ruiz-Galbe y César Ciriano impugnaron las escuchas telefónicas. Unas semanas antes del juicio, el TSJA ya rechazó declarar nulos los pinchazos --desgajados de la operación Molinos-- en una resolución en la que señaló que su inclusión en la causa suponía una "anomalía procesal", aunque no de suficiente entidad como para su nulidad. También el magistrado que presidió el juicio, Alfonso Ballestín, avaló las intervenciones, aunque en la sentencia indicó que el jurado hizo con ellas una valoración inductiva.