El pleno de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) aprobó ayer por unanimidad el Plan Unificado de Subvenciones (Plus) del periodo 2018-2019, dotado con 49,7 millones de euros, de los que 10 millones se transferirán a los municipios beneficiarios, 292, el próximo 27 de abril. El resto del importe se irá facilitando a los ayuntamientos antes de que acabe el año, según explicó el presidente de la institución, el socialista Juan Antonio Sánchez Quero.

Con todo, el principal grupo de la oposición, el PP, consideró que estos fondos llegan tarde a los consistorios, que «tienen sus presupuestos paralizados cinco o se seis meses», en opinión de su portavoz, Francisco Javier Artajona. Los populares mantienen que los ayuntamientos se ven afectados por dos condicionantes: la excesiva anticipación con la que presentan el listado de sus necesidades y prioridades, dado que estas pueden variar con el tiempo, y la «larga tramitación» del plan de subvenciones.

Sánchez Quero, sin embargo, defendió la validez y los plazos del Plus, que fue una de sus promesas cuando asumió el cargo de responsable de la corporación provincial. Señaló que los funcionarios de la institución han tenido que estudiar 2.091 peticiones de los municipios, que dan lugar a otros tantos expedientes.

El presidente de la DPZ dio asimismo cuenta de la liquidación del presupuesto del 2017, dotado con 147 millones, del que dijo que se ha ejecutado «prácticamente al cien por cien». Denunció que del remanente de tesorería, por un valor de 32,5 millones, la regla de gasto solo permite utilizar 10 millones.

Por otro lado, se aprobaron dos mociones, una de CHA sobre el plan estratégico contra la despoblación y otra de En Común sobre la correcta financiación de las pensiones.