Los grupos de Ciudadanos, PP y PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza han pedido pruebas y documentos sobre la cesión del parque infantil Río y Juego a la ciudad de Pamplona durante la Junta de Portavoces extraordinaria que se ha convocado hoy para esclarecer la responsabilidad del equipo de Gobierno municipal.

Las tres formaciones han exigido en comparecencias ante la prensa previas a la junta la comparecencia del consejero municipal de Economía y Cultura, Fernando Rivarés, responsable de esta contratación, que se encuentra de vacaciones.

La portavoz de Ciudadanos, Sara Fernández, ha declarado que su partido exige que se muestre con pruebas cómo se llevó a cabo esta gestión: "A día de hoy no nos valen las explicaciones, queremos ver documentos y pruebas de las gestiones que se han estado haciendo", ha dicho.

Aspecto que ha hecho que el PSOE solicite formalmente al alcalde poner en marcha una auditoría interna con el objetivo de que se profundice en el tema de personal, de contratación y de gestión de ingresos, según ha informado la concejal socialista Lola Ranera.

Por su parte, la concejal del Partido Popular María Navarro ha sentenciado que la presencia del consejero en a la Junta de Portavoces Extraordinaria de esta mañana era "imprescindible" para su grupo y que al no acudir este por estar de vacaciones, su grupo va a solicitar una comparecencia en una comisión extraordinaria de cultura, "porque el consejero tiene que dar la cara" al ser "el máximo responsable del escándalo", porque el PP quiere que se aclare "hasta el último hecho de lo ocurrido".

A preguntas de los periodistas, Navarro no ha querido retractarse de sus declaraciones en las que afirmó que el consejero de Cultura era un "presunto delincuente confeso", a pesar de que Rivarés estudia, según fuentes municipales, su derecho a demandarle por un delito de difamación.

"Creo que dije la verdad, así que él haga lo que estime conveniente", ha insistido la edil popular.