Tras las fiestas del Pilar toca hacer balance. Pese a la polémica previa a los días de celebración por la ausencia del Párking Norte y del pabellón de Interpeñas, las entidades y colectivos que forman parte del grupo de trabajo de fiestas organizado por el Ayuntamiento de Zaragoza valoraron ayer de forma positiva los Pilares de este año. Las diferentes asociaciones coincidieron en que la descentralización tiene que ir más allá y llegar a más barrios. Desde Cafés y Bares reclamaron que se haga extensible a la oferta gastronómica, muy concentrada en el centro para que los locales del Casco Histórico no salgan perjudicados.

La asociación, que aplaudió la instalación de las Food Trucks (camiones de comida), de las conocidas Casa Regionales o la Feria Artesanal, propuso al concejal de Cultural, Fernando Rivarés, la posibilidad de diversificar la oferta y llevar barras temporales a otros distritos. Aseguraron que, por ejemplo, si se llevasen al parque Delicias, los bares de los alrededores se verían beneficiados porque se convertiría en un foto de atracción y, por lo tanto, acudiría más gente. «Es verdad que en el Pilar se gana dinero, pero pagamos impuestos y facturas todo el año y a los puestos que se instalan durante una semana no tienen que cumplir con las mismas exigencias», apuntaron.

Otra de las demandas más escuchadas en la reunión de ayer estaba directamente relacionada con el público joven de entre 12 y 18 años. Por ejemplo, desde la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Aragón (Fapar) propusieron que se planteen actividades también para alumnos de Primeria y Secundaria, no solo para niños de Infantil. Tanto Interpeñas como la Unión Peñista de Zaragoza hicieron un balance positivo de las fiestas. Desde la Federación de Peñas instaron a Rivarés a ponerse a trabajar ya en enero en la licitación de un espacio en enero, para evitar que en las próximas fiestas los peñistas vuelvan a quedarse sin pabellón de fiestas.

La Federación de Asociación de Barrios de Zaragoza (FABZ) declaró que había sido positivo que este año hubiera habido un único recinto, el de Valdespartera. «Se ahorra en costes y se apoyo así la descentralización en los barrios», precisaron.

Una apertura de las fiestas que tiene que seguir cogiendo fuerza y mejorando su programación en los distintos distritos de la ciudad, tal y como reclamaron ayer en el grupo de trabajo los diferentes agentes implicados. Una petición que coincide con las intenciones de Rivarés.